martes, 11 de diciembre de 2012

LA FUNDACION DE CONCHUCOS


ANTECEDENTES

El curacazgo de los Conchucos, tuvo por hábitat, lo que en la actualidad forman las provincias de Pallasca y Corongo; no fue esta etnia ni tan grande ni tan pequeña. Estamos hablando de aproximadamente 3307.43 kilómetros cuadrados de superficie. Los Conchucos, como todas las etnias del Tahuantinsuyo, estuvieron organizados en huarancas y pachacas, cuya población vivían en pequeñas llactas. Las ruinas de estos pueblos, todavía existen, algunas de ellas aún continúan habitadas; tal es el caso de: Cochaconchucos, Tilaco, Lacabamba, Pampas, Pallasca, Cabana, Corongo, Pampas, Tauca, etc.

Los Conchucos, tenían buena agricultura, buena ganadería y eran ricos en minerales como el oro y la plata. Según el cronista Cieza de León, en estos pueblos no dejaba de haber muchos depósitos y aposentos como en toda la zona. El Qhapac Ñan por todas estas partes lo tenían siempre bien cuidado y muy limpio; los naturales de estos pueblos, eran de mediano cuerpo y llevaban  cordones o señales en sus cabezas.

Se afirma, que los Conchucos eran buenos guerreros y muy rebeldes. Para resistir la conquista Inca, se unen con los Huaras y Piscobambas. Después de seis meses de cruentos combates, son conquistados por Cápac Yupanqui y su sobrino el Inca Yupanqui, al mando de un ejército de cuarenta mil soldados.

El curacazgo de los Conchucos después de la conquista española, fue convertido en encomienda. Como era una zona inmensamente rica en oro y plata, poseía buena agricultura y buen ganado, es escogido por el marqués Francisco Pizarro como  su parte del botín de la conquista.

Los Conchucos, en el año 1539, se rebelan contra los abusos de los mayordomos del encomendero. Se resistieron a pagar más tributos en oro, plata y en otros productos que ellos no poseían. La reacción del Conquistador fue de enviar a Francisco de Chávez para que sofocara la rebelión. Chávez partió con un ejército desde Lima y tuvo un comportamiento cruel, arrasó la tierra de los sublevados. Entre julio y setiembre de 1539; ordenó saquear, incendiar y robar a todos cuanto pudieran. Como los hombres y las mujeres huyeron de sus moradas a las quebradas, dejando a sus pequeños hijos en sus casas, porque jamás pensaron que contra tan pequeñas criaturas iban a ensañarse los españoles. Lo cierto es que Francisco de Chávez, dirigió la horrorosa matanza de 600 niños menores de tres años de edad, a quienes lo degollaron cruelmente. Después de sofocar y apaciguar a los Conchucos, el genocida de Chávez regresa a Lima, en donde es premiado por el mismo Francisco Pizarro.

Asesinado el Marqués, el señor gobernador Cristóbal Vaca de Castro ordena una visitación al curacazgo de los Conchucos; con la finalidad de repartir la opulenta encomienda que había pertenecido al Conquistador, entre los españoles Bernardo de Valderrama y Luis García de Sanmanés. Señalando 1100 tributarios a cada uno. Con el objeto de que los beneficiados no se pelearan defendiendo sus derechos, en el año 1543, Vaca de Castro dispuso llevar a cabo una visita para determinar los pueblos y los pobladores que deberían distribuirse entre los dos españoles. Cabe mencionar que este curacazgo, una vez convertido en encomienda, su población fue sometido a una terrible campaña de explotación y de exterminio; es en estas circunstancias que se realiza la visita y el encargado fue Cristóbal Ponce de León. La visita y el censo abarcaron todo el curacazgo de los Conchucos; en consecuencia la información que se proporciona, es de vital importancia y es fundamental para el estudio, porque contiene datos sobre la demografía étnica y el número de Centros Urbanos, cuya lista y nombres proporciona. Los datos de este censo son los más completos y antiguos que se conocen gracias a la investigación realizada por el historiador Waldemar Espinoza Soriano.

Según la visita que realizó Cristóbal Ponce de León; se concluye que, en el curacazgo de Conchucos existieron tres Huarancas a lo que el visitador los denomina parcialidades:
  • Primera Parcialidad, de Carapuray, gobernada por el señor Pomacochachi con 21 llactas.
  • Segunda Parcialidad, gobernada por el señor Yanamango con 26 llactas.
  • Tercera Parcialidad, del señor Colcallax con 31 llactas.
      El censo comenzó el 27 de agosto y terminó el 12 de setiembre de 1543, reunidos todos los involucrados en el tambo principal de Conchucos. Como dato anecdótico, mencionaremos, que la llacta con mayor cantidad de tributarios fue la de Llapoco (Llapo), con 150 y la llacta con menor cantidad de tributarios fue la de Andabamba, con cuatro.

Aproximadamente, en el año 1565, cuando Lope García de Castro agrupa 5 curacazgos y señoríos étnicos para constituir un corregimiento, a este le puso el nombre de Conchucos. Hecho que evidencia el gran prestigio de dicho curacazgo, por cuanto lo eligieron como cabecera o capital de la nueva demarcación colonial. Los otros reinos y señoríos étnicos fueron: Sihuas, Piscobamba, Huari y Pinco.

LA VILLA DE CONCHUCOS
Las minas de oro y plata que existían en esta región, atrajeron a los españoles; quienes para explotarlos, fundan un pueblo con el nombre de Villa de Conchucos; aunque la historia de esta villa, se inició con su fundación española en el siglo XVI, este territorio estaba ocupado anteriormente por asentamientos pre-incas como la de Cochamaca, Malaha (Majada), Paracocha (Pariachuco), Yanacarca (Yanamarca, Tauli), Cavichale (Caviña), etc.

Esta villa fue muy importante en la colonia; no es casual que el único dibujo que hizo Huamán Poma del departamento de Ancash, en su famosa obra Nueva Crónica y Buen Gobierno, fuera el de la Villa de Conchucos, que a continuación publicamos.

Esta dicha uilla de Conchucos, minas de plata, fue fundada por los señores bizorreys en tienpo del rrey don Phelipe el segundo, monarca del mundo.
Esta uilla tiene juridición de yndios cirues a las dichas minas. Y es tierra fría y buenos mineros y buena gente que no tiene tanto daño ni mal tratamiento de los caciques prencipales y de los yndios como en otras uillas y minas. Y le pagan a los yndios rrazonablemente y no se muere tanto como en las minas de azogue. Y tienen bastante de comida y son grandes seruidores de Dios y de su Magestad y buenos cristianos. Y tiene limosna, caridad con los pobres. Y tiene mucha carne y tiene sus yglecias y cristiandad y pulicía y buenos caualleros y becinos, soldados, yndios en la dicha uilla y bien criado y dotrinado ellos como sus mugeres y hijos.
Y acudi[n] en todo lo que se le manda su Magestad y su justicia y jamás auido rreuelde ni mentira en ellos ni auido jues entrado a ellos en esta dicha uilla.

El único  testimonio de la fundación de la villa de Conchucos conocido hasta ahora, es el del cronista Felipe Huamán Poma de Ayala, que señala que esta villa fue fundada en el reinado de Felipe II; es decir entre los años de 1556 - 1598, no se ha podido encontrar la fecha exacta de la fundación, ni quienes lo hicieron.

Conchucos, camino al milenio; debe proponer entre sus objetivos estratégicos, el de averiguar la fecha de su fundación, así como también el estudio, conservación y difusión de los asentamientos pre incas que se desarrollaron en este lugar. Esta decisión tendría como finalidad fomentar en la población conchucana, la conciencia histórica para que vele y recupere su patrimonio. Además, Conchucos merece un desagravio ante la historia, porque muchos comprovincianos pensaban que cuando se funda la villa de Conchucos, se hizo sobre una tierra deshabitada y sabemos que no fue así.

Por último, quiero refutar al historiador Espinoza Soriano, porqué afirma en su libro que el antiguo y mentado nombre de Conchucos, ha quedado relegado a un miserable y triste caserío, que tiene el rango de villa. Versión  totalmente falsa, porque Conchucos desde su fundación siempre ha sido un pueblo importante. En la actualidad es el distrito líder de la provincia de Pallasca y creemos, que nos merecemos de lejos, habernos quedado con el nombre del curacazgo.

Los antecedentes, es  un resumen del libro “El Curacazgo de los Conchucos y la visita de 1543” del historiador Waldemar Espinoza Soriano. Para leer la versión completa de este libro  hacer clic AQUÍ