La NASA hará público el descubrimiento del Curiosity,
sobre el que se ha creado una gran expectación, durante la conferencia anual de
la Unión Geofísica Americana, en diciembre
José Manuel Nieves / ABC.es / Madrid.
José Manuel Nieves / ABC.es / Madrid.
Hace dos días, John Grotzinger, el investigador
principal de la misión Curiosity, anunciaba en una entrevista radiofónica que
uno de los instrumentos del sofisticado vehículo había recogido datos que "cambiarán
los libros de historia". De inmediato, muchos pensaron que se estaba
refiriendo, precisamente, a una de las noticias más esperadas por la comunidad
científica internacional: el hallazgo de pruebas de la existencia de vida en
Marte.
El rumor se extendió como la pólvora a través de las
redes sociales y las palabras de Grotzinger empezaron a ser rebotadas por los
principales medios de comunicación del mundo. A primera hora de la mañana de
ayer, ABC fue el primer medio español en hacerse eco de la noticia, que fue la más visitada del día por
los lectores de nuestra edición digital.
En sus declaraciones a la National Public Radio
norteamericana (NPL), el investigador de la NASA aseguraba que "los datos
prometen realmente mucho" y anunciaba que los resultados se harían públicos
en un par de semanas, probablemente durante la inauguración de la conferencia
anual de la Unión Geofísica Americana, el próximo 3 de diciembre.
Hasta ese momento, y para evitar
"patinazos", el equipo de investigadores realizará análisis
adicionales para asegurarse de que los datos del Curiosity son, efectivamente,
lo que parece. Pero Grotzinger dio otra pista sobre la naturaleza del
descubrimiento. El hallazgo se realizó, en efecto, con un intrumento muy
concreto del rover, el SAM (analizador de muestras marcianas), capaz de detectar
un gran número de componentes biológicos presentes en el aire o en las
rocas, así como de analizar materia orgánica. SAM consta a su vez de
tres instrumentos (un cromatógrafo de gases y dos espectrómetros diferentes)
que son perfectamente capaces de buscar compuestos del carbono, como el metano,
así como restos de oxígeno e hidrógeno o identificar materia orgánica.
Lo cual, por supuesto, sugiere con fuerza que el
anuncio de la NASA tendrá que ver con la búsqueda (o el hallazgo) de pruebas
que demuestren que en Planeta Rojo hubo (o hay) alguna forma de vida. Durante
la tarde de ayer, otros miembros del equipo del Curiosity respondieron a las
preguntas de los medios. Y si bien es cierto que intentaron rebajar las
expectativas, ninguno de ellos desmintió la posibilidad que el hallazgo
estuviera relacionado con la presencia de vida en Marte.
«El equipo científico está analizando los datos de una
muestra del suelo marciano, pero no se puede hablar de eso en este momento»,
dijo por ejemplo Guy Webster, portavoz del Jet Propulsión Laboratory (JPL).
«Esto no cambia los procedimientos habituales: deben confirmar los primeros
resultados antes de hacerlos públicos», añadió.
Gran expectación
Por otra parte, ABC se puso ayer en contacto con
varios exobiólogos de la NASA, quienes confirmaron que el ambiente que se
respira en muchas dependencias de la agencia es de gran expectación.
"Grotzinger es un científico muy reservado y de una gran reputación
-apuntaba a este periódico un investigador desde Houston- y si dice algo hay
que tomárselo muy en serio".
Por si fuera poco, el mismísimo perfil en Twitter del
rover Curiosity, que cuenta con más de 1,2 millones de seguidores, añadía leña
al fuego: «¿Qué descubrí en Marte? Ese rumor se extiende deprisa en
Internet. Mi equipo considera que está misión será de las que aparecen en los
libros de Historia».
De lo que no cabe duda es que estamos ante un hallazgo
de suma importancia, y de que hay muchas probabilidades de que ese hallazgo
esté relacionado con la búsqueda de vida en el Planeta Rojo. Una tarea a la
que la Ciencia ha dedicado ya varias décadas y que ha supuesto, por ahora, el
envío de cuarenta naves científicas a Marte. Si todo va como está previsto, el
próximo 3 de diciembre la NASA desvelará el misterio. Hasta entonces, habrá que
tener paciencia...