SANTIAGO ORÉ MARREROS PIONERO DEL SEMBRÍO DE TRUCHAS EN LAS LAGUNAS Y RÍOS DE LA PROVINCIA DE PALLASCA

Fernando Lara Quezada

Por: Fernando Lara Quezada

Gracias a la fina cortesía del director señor José Montero Herrera cediéndonos un espacio en la revista El Pallasquino, nos permitimos comunicar la triste noticia del fallecimiento de don Santiago Oré Marreros, ocurrido el 20 de diciembre de 1992 en la ciudad de Lima para que todos sus buenos y apreciados amigos que ha tenido en los pueblos de nuestra querida provincia, así como en Lima y otros importantes lugares del país estén al tanto de su desenlace y puedan recordar en algunos instantes de su tiempo al gran hijo conchucano y pionero del sembrío de truchas en las lagunas y ríos de la provincia de Pallasca, que actualmente constituye una de sus más valiosas riquezas y de extraordinaria importancia en la alimentación popular.

COMO SE ORIGINA LA IDEA DE LA SIEMBRA DE TRUCHAS EN LA PROVINCIA

El 10 de noviembre de 1946 un fuerte terremoto estremece los pueblos de la provincia de Pallasca y Sihuas, causando su destrucción, sin posibilidades inmediatas de reconstrucción y Progreso; hasta entonces nuestra cuenca hidrográfica no era aprovechada debidamente como ocurriría años después. Fue precisamente a fines del año 1947 y a comienzos del año 1948 que sale publicado en los diarios de la capital avisos en lo que el Ministerio de Agricultura a cuyo cargo estaban las estaciones experimentales de Piscicultura, ofrecía dotaciones de truchas a los pueblos e instituciones representativas para sembrarlas en los lagos y ríos del país .Fue entonces que Santiago Ore Marreros lleva esta información al Centro Social Conchucano, institución representativa del distrito de Conchucos,provincia de Pallasca con sede en Lima ,en donde se toma un acuerdo por unanimidad para solicitar una dotación para Conchucos,encargándosele a el mismo en su condición de socio y directivo realizar las gestiones pertinentes ,encargo que recibió con mucho agrado.

LOS TRES INTENTOS PREVIOS DEL SEMBRIO

La falta de una infraestructura vial apropiada en nuestra provincia en los años que se intentó realizar los primeros sembríos de truchas, fue realmente un gran obstáculo para lograr los ansiados propósitos ,aparte de no contar con otros elementos técnicos que se requería para hacer llegar con vida a los alevinos hasta los lagos y ríos a donde iban destinados. No se contaba tampoco con recursos económicos para financiar el transporte de las referidas especies, que tenían que ser trasladadas desde la Estación de Piscicultura de Santa Eulalia en Chosica ,siendo en conjunto las causas principales para el fracaso en tres viajes consecutivos ,dos por Chimbote en ferrocarril vía Chuquicara –Quiroz y el otro por la ruta Chimbote-Chuquicara-Pasacancha-Yuravilca.

Fueron precisamente estas primeras dificultades que en lugar de desalentar, sirvieron de acicate al infatigable pionero para emprender con más fuerza este proyecto a fin de que no fracase. El Centro Social Conchucano ayuda en parte pero no es suficiente y es ahí donde destaca su figura, haciendo uso de sus propios recursos a base de mucho esfuerzo , sacrificio personal y familiar hasta ver coronado sus sueños en bien de su pueblo y de su provincia.

EL PRIMER SEMBRIO DE TRUCHAS EN LAGUNAS Y RIOS DE CONCHUCOS UN ACONTECIMIENTO HISTORICO QUE NO PODEMOS OLVIDAR

Este año se cumplirá cuarenta años del primer sembrío de truchas en las lagunas de Llamacocha y San Lorenzo en el distrito de Conchucos, recordando que el diez de agosto de 1953 parte de la estación de Piscicultura de Santa Eulalia en Chosica-Lima, un carro estanque con una dotación de mil truchas, que se dirige por la ruta Trujillo-Quiruvilca-Pampa El Cóndor hasta el lago de Pelagatos. En este viaje para el que se toman todas las previsiones técnicas indispensables van el Ing. Moreno, jefe de la estación de Santa Eulalia, el biólogo, Carlos Rendrich y comandando esta histórica jornada el pionero Santiago Oré Marreros.

El día 11 de agosto de 1953 arriba la delegación a Pelagatos con el carro estanque, que con todo éxito hacia llegar las mil truchas en magníficas condiciones de vida, porque se había implementado convenientemente con balones de oxígeno, bastante hielo y con equipo de bombeo para el cambio de agua fresca que se tenía que realizar durante el trayecto. En este lugar más de doscientos conchucanos salen al encuentro portando latas para realizar el traslado, produciéndose una gran manifestación de alegría al comprobar la llegada de las truchas; el clima emocional de la caravana conchucana es excepcional que se dispone de inmediato a efectuar la última etapa.

Los técnicos dan las últimas instrucciones para la conducción de las truchas, recomendando el cambio de agua cada cierta distancia e inmediatamente desfilan rumbo a Llamacocha, a donde comienzan a llegar uno tras otro a las cuatro de la tarde, después de una caminata de tres horas y media.

ACTO FINAL MUY EMOCIONANTE

Santiago Oré Marreros mostrando dos truchas obtenidas en el primer concurso de pesca el 19 de setiembre de 1955.

Tal como tenía que ocurrir, al llegar a la laguna de Llamacocha los grupos de transportistas en un acto verdaderamente emocionante procedieron a echar las truchas al agua pura y cristalina ,haciéndolo en primer lugar el promotor del sembrío: Santiago Oré Marreros y a continuación los demás hijos conchucanos, entonándose con mucho fervor cívico el Himno Nacional ,con lo cual quedó sellada esta jornada histórica, que se sintetiza en esta primera nota, con el compromiso de hacer conocer otros pasajes relacionados con el sembrío de truchas, tanto en Conchucos como en los demás pueblos de la provincia de Pallasca,porque es necesario y justo hacer conocer también el apoyo de distinguidos conciudadanos y especialmente de personas que participaron en el comité Pro-sembrío de Truchas de la provincia de Pallasca,asi como las instituciones que le testimoniaron en vida su reconocimiento por su labor cumplida.

Que todos los amigos en general sepan que Santiago Oré Marreros quiso mucho a su pueblo y a su provincia y su deseo permanente fue que las truchas se multipliquen. Fuente: Este artículo escrito por Fernando Lara Quezada fue publicado en el mes de marzo de 1993 en la revista El Pallasquino en su edición No 29. La fotografía ha sido proporcionada por la Sra. Yolanda Oré Vda. de Lara